Corre...

Buscas misericordias que te traicionaron, esas perras falsas que mintieron a tu mirada y engañaron tu sonrisa. Aún así, buscas intensamente su dolor, la fealdad que te amparó (en esas historias la cual nunca fuiste la protagonista) en las calles de confusión que nunca debiste correr…Necesitas esas promesas que nunca se cumplieron: las rosas que nunca fueron rojas (ni rosadas, ni nada); los besos que jamás fueron amor; los abrazos disfrazados de calor, para después enfriar tu pecho; las vivas sonrisas, que después fue una leve muerte, de instantes de finitos sueños…
Develas los llantos a tu hermosa luz, la luz que no se apaga, la que no deja de iluminar los abismos de un amor, pasión, locura… Dejas que tus lágrimas formen mares (azul, bien azul, fresco), para que nades desnuda, para purificarte, limpiarte de olvidos que ensucian tu bello cuerpo. Renuncias a pensar en los dueños de tu felicidad y marcha más lejos de donde te pierdes, borrando los mapas que fueron escrito con tu sangre(todavía tienes direcciones en tu corazón), la ardiente esencia de vida y deseo…Desapareces, antes que vaya a buscarte(no se nadar, tengo miedo), y muera en tus aguas…