miércoles, 29 de julio de 2009

compañeros


En esta noche de locura y vicios, el hablador y el guitarrero forman el dúo rapsódico que llenara los vacíos de cada oído del inquietante público. Se interponen improvisaciones profundas del relator con las más ricas melodías que el guitarrero deslumbra...Y continúan así:

-En los oscuros rincones de cada ilusión empieza a hacer frio sin una puta esperanza de ardor. Cada suspiro de tiniebla reduce más la inmensa Fe que alguna vez se tuvo, desangrando más aún en el olvido tenebroso aquel que jamás supimos dejar de besar con la lengua...Toque guitarrero para que el sol brillante y ardiente nos queme el dolor y nos broncee de su consuelo...

No quiero traer sobras de amor, me es incapaz de dar otra ilusión a lo que nunca amé. Todos evadimos cada culpa para no quedar atados a un problema, a un mal que defecamos sin tener culpa. Mis amigos...El amor no se sostiene con promesas, palabras comunes ni celos; se hace con hechos que van más allá de un querer, un "te amo", que perpetua en lo más fondo de los sentires, quebrando los ríos de lagrimas y transformándolas en mares azules, saladas y quietas...Siga tocando a esa bella mujer, cuerda por cuerda, sin limitarse a desafinar. Ella nunca desafina, son los HOMBRES que la usan...No pare nunca guitarrero, cada nota despierta la calentura de cada pareja que nos mira. Calentémosles sin cesar...

Las habladurías del amor no podrían ser fuerte sin su archí enemiga, la soledad...Algunos poetas y nadarradores han implementado un desprecio inaudito a sus coquetas garras, tratándola de perra, hija de puta por tenerla a su lado...Pero ellas siempre es fiel, más cuando tranzamos con el amor y todas sus vertientes. Cuando otra vez nos envolvemos solos en la vida, ella nos espera con las piernas abiertas, para hacerla el amor, sin ningún perdón, reproche ni enojos...Adelante, compadre...Tu música es la soledad para cada ser que se encuentra sentado en el fondo, tomando una cerveza o fumando prohibiciones. Alimenta más notas en sus hombros, compañero mío...

Las voces de cada desinteresado aquí presente me dan más pasión para recitar y hacer lo imposible para que me escuchen de verdad. Las mil voces se aprietan en borrachos que pierden la razón, intoxicados que quieren flashar más, cuervos que ven a una señorita en estado de facilidad para engrupir su tranquilidad en toqueteos, besos fugaces y propuestas magistrales.

El humo se apodera de este escenario como el olor intenso de alcohol y risas nocheras, mientras los versos cesan y la música sigue...Esta noche, querido amigo, los necios codician la voz de tu hermosa guitarra... Hasta los sordos escucharán la música de tu esencia, que penetra en sus oídos con tenacidad formando más almas pérdidas en este momento...Gracias, compadre, por acompañar éstas alocadas letras con tu mundo de acordes y solos de guitarra...-

La terminada obra entre el relator y el guitarrista fue motivo de aplausos, silbidos y reverencia de parte de aquellos locos de la vida...Brindando con sus copa alzadas a los cielos para así beber lo que queda de la noche.

lunes, 27 de julio de 2009

Golpes y escapes

...Riendo los dos hermanos, comen esos platos llenos de papa frita, con una sopa seca de cebollas y otras verduras. Era la única comida que podían disfrutar, debido a la falta de provista; aun así la exquisitez se perdía en sus bocas.

Ella, algunos años mayor que él, lo observa como devora la comida como si fuera la última vez que comiera. Recuerda las tantas experiencias que tuvo que afrontar por las aventuras del pendejo a los riesgos más caóticos que puede transitar: accidentes, desobediencias, enojos...Cada etapa de RIESGO del pibe, fue un aceleramiento de su corazón y de su preocupación. Siempre trató de alinearlo en su educación, modales y más conceptos para su desarrollo en esta vida. La ausencia de su madre hace ya algunos años como la ubicación incierta de su padre tras su vagancia, son motivos suficientes para una total libertad; no obstante, ella habla en su interior: "Pero tiene una hermana, no hará lo que quiere"

Sin temor, corrige a su hermanito los defectos fatales de su comer, pero éste se encapricha, lloriquea y deja de englotonar. La lucha cansadora entre la joven y el niño deja como evidencia las lágrimas de esa personita: "¡No te quiero más! ¡Mala!" replica con enojo el chiquilín, mientras las risa encantadora de su hermana brilla en sus ojos y suspira en voz media alta: "Te estoy educando, E... si te portas bien te regalo el chocolate que esta adentro de la heladera" Como es de esperarse, el niño hizo un esfuerzo para mejorar, y cambió ese enojo agrio en una sonrisa angelical(grande, graciosa y con dos dientes menos en su paladar, debido al desprendimiento de colmillo de leche) que hacía alegrar a su hermana mayor.

Terminado el almuerzo, el chico sin preguntar, junta todos los utensilios usados y los lava con entusiasmo-por el postre- todos los cubiertos y demás (mal lavado como es de esperarse) Tras ver la buena predisposición de su hermanito, dona el chocolate a sus ansiosas manos y disfruta ese postre...Sentados en aquél sofá sucio (prenden la televisión) y se centran a mirar los videos de MTV que están de modas. Los coros empiezan a hacerse notar por las radiantes voces de esos hermanos...Callada, vuelve a contemplar a su hermano cuando tatarea un tema de red hot chili pepers; se enorgullece por hacer posible que él sea buena persona, lejos del peligro y de las malas juntas...

Llega el padre...Borracho hasta los codos, regresa a su casa; tal vez a buscar más plata para sus giras o simplemente vuelve. Su hijo, contento y simpático, lo abraza, es relevante el sentimiento del pibe a su papa, el amor es así. Pero su hija, lo mira con rabia, por su ausencia, abandono y por el olor insoportable de alcohol: "A este hijo de puta no le importa si tiene una familia y a su hijo menos que es su responsabilidad" (pensaba la joven con furia)

Las primeras discusiones nacen sin contracciones: humillaciones, reclamos y más cuidados (Desde hace dos años ya) que el padre debe cumplir. La situación se torna violenta...El ebrio lanza una bofetada a su hija sin culpa, la tumba al suelo y empieza a golpearla; pero ella no calla, con más fuerza putea a ese desgraciado, aún con dolor maldice con toda sus ganas al opresor, que no se detiene. Los golpes son continuos y los gritos cada vez más altos. El niño es testigo de ese maltrato, lo dejan entre la espada y la pared ver como el "macho" lastima a su propia sangre; se confunde y llora por el sufrimiento de su hermana...El mal parido cesa su violencia y se aleja, quedando la chica con dolores y con nerviosismo; ella pide con sus ojos llorosos a su hermano: "Ayúdame, ayúdame..." Mientras la sangre se escurre por sus labios y terminan en el piso. El pendejo queda helado ante esas suplicas, logra levantarla a su hermana, la abraza y lloran juntos. La amargura recae sobre él, suelta a su hermana y huye, corre derramando cada lágrima incontrolable que terminan en el camino...

viernes, 24 de julio de 2009

Saldando deudas...bien pagadas


He sembrado muchos males en esta vida, arrasando con ilusiones, amores, amistades y hasta mi propia familia. A veces recuerdo con horror aquellas noches alocadas: alcohol, drogas fugaces, sexo bolichero y engaños dolorosos (Mientras tomo la última de las 5 pastillas que debo tomar todos los días, acostado mirando la lluvia desvanecerse por mi ventana) que condimentaban ese telón. Me sorprendo las infinidades de promesas que prometí a costa de una noche lujuriosa, como el gasto descomunal de tragos misteriosos y polvos...y más polvos...

La debilidad de mi cuerpo justifica mi reposo parcial en esta cómoda cama, que se ha vuelto mi única amiga desde hace un par de meses. Pero me levanto a buscar un libro y distraer mi atención. Cuando me pongo de pie siento que voy a caer, me mareo de tal manera que, me agarro de la mesa y consigo sentarme en la silla. Antes no paraba nunca de moverme, ahora casi no puedo permanecer en equilibrio. ¡Odio no tener fuerzas! Tal vez por perder 20 kg a causa de esta enfermedad me ha puesto inútil para todo...

Junto valor y vigor para levantarme y otra vez pararme, utilizo como sostén mis brazos por encima de la silla y asciendo de apoco flexionando las flacas piernas; el dolor de mis rodillas es insoportable, no obstante consigo una vez más caminar sobre mi espacio. Observo el mueble que esta en el living, en el se encuentran más recuerdos dolorosos...Decido rescatar esa azul caja (ahí están acumulados las pistas)Arrimo un banquito y me subo a rescatarlo (con más mareos claramente) y concluyo en sujetarlo con mi manos y bajarme urgentemente antes de caer.

Pensativo, ansioso o penoso por decirlo, reviso todo su interior y encuentro variedades de cartas, fotos, cajas de forros, pulseras y otras prohibiciones...Esta vez me quedo sentado en la alfombra con las fotos en mi mano izquierda: las observo una por una reviviendo los ambientes transcurridos con esas tantas gentes que sale al lado mío. Hasta que la encuentro a ELLA (una nostalgia recorre mi cuerpo, me hace un mal estar en el estomago) sonriente y con su bello rostro, recostada en mis hombros. Fue la última mujer de mis días de joda y gloria, esa famosa chica enviada por el destino para saciar mis últimas apetitosidades (Una leve lágrima nace de mis parpados para terminar en mi nariz) sobre mis aventuras. Recuerdo que esa primera noche que la vi despertó en mí un fuego ardiente que quemaba mis entrañas y me hacía perder la cabeza. Tras algunos besos y toqueteos nos fuimos a su casa y...La perversión y la calentura quemó esa cama con sabanas celestes (me excito lentamente esa situación) hasta el amanecer de un día nublado. La despedida fue un hecho, pero el olor de su perfume quedo intacto.

Los días pasaron, y no se por qué razón pensaba en ella cada instante, presentía un frio en el verano de mis trasnoches. Por suerte antes de despedirme de su casa me dejo su número en un pequeño papel, decidí entonces llamarla...Me dijo que estaba en el hospital y tenia que decirme algo urgentemente. Acordamos un lugar en cuestión y me re encontré con esa morocha. Tras un saludo seco, me confesó su grave enfermedad y se largo a llorar sin vergüenza; la abrace para un consuelo tonto y miró a mis ojos y dijo "Alejandro, tengo sida hace 3 años. No te lo advertí antes porque la borrachera me gano". "¡Perdóname!" Esas declaraciones rasgaron mi ánimo. Me fui sin despedirme de ELLA, con la vista agacha y con profunda preocupación...YO, el rey de las fiestas, nunca preste atención en los cuidados para el sexo. Siempre ignoraba los preservativo-de vez en cuando- me concentraba solo en el gozo(aprieto mi puño derecho y lloro al vacío).

Enterado por esa novedad me hice análisis con un tenaz nerviosismo; la esperada confirmación sucumbió mis oídos: "IVH reactivo" Enfurecido con Dios y conmigo mismo, me encerré descartando toda aproximación con mis pares. Desaparecí para no volver a ver a nadie.

Guardo la foto, mientras lloro con abundancia y con una frialdad en mi pecho. Rio al mismo tiempo, por que me lo merezco, hice daño, mucho daño. Esto no se compara con las infinidades de injusticias que he cometido (trato de no llorar más y ser valiente, pero no lo consigo) y que jamás me arrepentí en su momento. Ahora me humillo y bendigo este castigo (no paro de llorar)

Mi esfuerzo por levantarme es en vano, prefiero gatear hasta el baño; llegó y vomito todo el almuerzo, al mismo tiempo, la diarrea (hace 2 años vengo teniéndola) se apodera de mi también...Transpiro por toda mi piel pálida, sin vida, calor que acompaña con esta seca tos. Más mareos experimento, estando sentado todavía en ese inodoro obsceno (tratando de levantarme otra vez)

miércoles, 22 de julio de 2009

Humedad


La mañana vuelve una vez más en este frio día, con lluvias que no dejan de regar las inmensas calles de la ciudad. En algunos rincones forman pequeñas inundaciones por el volumen incondicional de esas gratas gotas.

La humedad invancable, por momentos, adorna sobre todos los suelos, paredes e innumerables partes. Nadie se salva de sus abrazos pesados y sin amor. Por momentos es inspiración para algunas líneas poéticas, pensamientos profundos o solos sentir algo bueno que muchos lo toman por malo.

El diluvio no cesa, pareciera que cayera más intensas gotas, acompañada con ráfagas de viento continuamente que, hacen vibrar la cabellera y las manos de los arboles, las pelucas de algunos arbustos y hasta algunas chapas de viejas casas...

Algunos ilusos (creyentes a morir) justifican esas lluvias como un enojo celestial del CREADOR, por la impunidad del HOMBRE sobre el mundo y en sus nefastos mandamientos. Otros, ignorantes (borrachos de religión y humoristas de la vida) creen que Dios nos mea sin piedad, para despertar de nuestras resacas. Tenemos a sabios (ambiguos y muy flasheros) que insisten es el llanto del TODOPODEROSO atraída por el frustrante NO de algunas DIOSAS al mismísimo JEHOVA (ALÁ, DIOS, YAVÉ) ¿Tenemos un excelencia con poco levante?

El trabajo me llama a gritos, a cambio de sudor y dinero, para humillarme ochos horas de mi vida en esa cansada oficina, usando algún fugaz talento para esa famosa empresa...Un querido amigo judío, Saúl Lowenstein, en una ocasión me contó en brevedad, la historia del trabajo: " Cuando Adam y Eva desobedecen la advertencia de Dios, de no comer ese fruto prohibido, estalla en irá y les dice: "De sus manos trabajaran para ganarse el pan de cada día, matar a animales para comerlos y así sobrevivir el resto de sus días como también sus descendientes" Después fueron expulsados del edén sin la gracia de NUESTRO SEÑOR".

Cuando terminé de escuchar su explicación. Ansié por algunos instantes estar en ese episodio antes que cometieran esa hazaña y ahorcarlos a los 2 para zafar de ese mandato. ¡Malditos! Si vivieran ahora no soportarían la maldita rutina de romperse el culo trabajando y perdiendo el finito tiempo...

Mis pasos acercan al destino que debo tomar: el maligno tren. Atropello los charcos de agua, formados por las grietas de algunas calles en mal estado. Sin querer, o por torpeza, mojo mis secos pies a merced de esa rotas baldosas que se interponen a mi ruta; salpicado de barro parte de mi jean, por debajo...Los autos juegan un papel importante en esta linda mañana: con su gran velocidad, sin tener en cuenta la lagunita que se haya y de que estoy al lado, arrasan con gran brutalidad ese conjunto de H20, salpicándome en su totalidad la pierna izquierda. Esto me incentiva a bendecir a ese querido conductor: "¡¡Hijo de re mil puta!!".

Con el pelo mojado, el piloto semi mojado, el 78% del vaquero empapado llego a esa estación, con más gente a mi alrededor que cumplen una obligación. En hora pico es agobiante viajar en ese tren eléctrico modelada de un colorado obsceno y un amarillo sin vida, pero la realidad se aferra por un boleto barato y rápida llegada, no obstante la comodidad altera el nerviosismo de cada viajero.

Llega el tren...Las personas se posicionan a una entrada exitosa cuando se abran las puertas: Lo hace sin pudor, lo seres desesperan por entrar, sin importarle a las otras que deben bajar primero; una educación pérdida a través de estas necias generaciones. Entro, los empujones son constantes en consecuencia del amontonamiento de cuerpos. Por casualidad encuentro un hueco en donde meterme, en la puerta opuesta donde descienden la manada; no es aconsejable según el cartel que se encuentra pegado en él. Poco me importa, debido a que no hay otro sitio...Mi respiración se deteriora, el oxigeno se pierde en ese pegadizo conjunto de viajeros, poniéndome tenso...Al rededor veo a muchas caras desconocidas, que tratan de aguantar hasta sus llegadas. Unos pajeros aprovechan para apoyarse en las hermosas chicas que deben arriesgarse a su respeto; otros hablan con su celular, alzando la voz para que todos escuchemos su conversación; algunos escuchan música a todo lo que da, sin tener el mínimo respeto al que esta al lado… El olor de cada persona se transforma la más rica fragancia del amado tren: estornudos, bostezos, tos, los que contienen el moco de sus narices, catarros retraídos a los pulmones de cada engripado...Convivimos por un tiempo corto, sin conocernos ni hablarnos.

Al fin llego a mi hermosa estación, me bajo con violencia tras más empujones… ¡Libre! voy hacía esa cueva a prostituirme por sudor y dinero, con el perfume agrio de aquellas almas y la humedad intacta en mi piel.

martes, 21 de julio de 2009

Final (bien hundido)


Todo se desbordó por completo, el descontrol no se hizo esperar ni un minuto más ni dejar de lastimarme cada vez. La dificultad del vicio se propago para todo mi tiempo y el resto de mi vida. Me pudrió toda la rica carne que una vez fui, esa riqueza de ser sabroso a esas indiferencias que tenía sobre ellas, pero...Ahora caí en mi propia mediocridad, no puedo levantarme aunque quiera, me venció, vencí por esas coquetas princesas, que hacen daño y te dejan al filo de un precipicio, basta con un poco más de tiempo para caer a la muerte...


Tenso infinitamente, las necesidades de hacer el amor con esas zorras me enloquecen hasta caer en la demencia. Mi organismo pide a gritos más y más de sexo ardiente y orgasmos múltiples a mí vil estado.


Las ganas de escribir huyeron de mí sin darme cuenta, cuando me perdía entre las piernas de las fulanas que pasaban por mis ojos. El arte que una vez fui protagonista me dejó, lo dejé sin sentirme culpable. La mágica imaginación que tuve alguna ocasión, se borró de mi cabeza, como algunos sentimientos propios que me hacían alegrar y soñar...


Dejé a trás a mi familia, verdaderos amigos, personas irremplazables a mi camino, seres que daban color a mis otoños negros, tristes... Y ahora, me encuentro desnudo sobre un invierno frío, enfermo de no tener abrigo para sentirme cálido nuevamente.


El razonamiento de mis errores se evaporan cuando otra vez cojo a otra puta, olvidando todo por completo, acabando de placer y malas locuras...Sus huellas se manifiestan en la pérdida de la memoria; las inmensa herida que torna en mis brazos, infectada por los suspiros de una aguja; mi nariz dañada por respirar el oxigeno más tenebroso que existe; mis pulmones...destruidos por más amores fugaces y alterando más el asma que no cuidé.

Agonizo en el piso con todas ELLAS a mi alrededor, las abrazo y disfruto con culpa el presente, mordiendo la esperada muerte.



lunes, 20 de julio de 2009

Desenlace ( a la esperada caida)

La entrada a esa curiosidad, me llevaron a conocer a muchas más ardientes prostitutas carnales: La bonita reina blanca, suave como la piel de un bebe y con su sabor inigualable, se pierde entre mis fosas nasales, sin prejuicios y sin temor. Se esparce por mis orificios hasta llegar totalmente al baúl de mi conciencia. Me estimula con gran tempestad, dándome una confianza extrema que nunca tuve, y sentirme el más fuerte de todos los hombres; dispuesto a enfrentar cualquier imposibilidad de algo.. Mi ansiedad llega a picos desbordantes, cuando busco beber más del jugo de esa ramera, su flujo excitante. No puedo parar de respirar ese viento lleno de ilusiones y perversidades...

He conocido a esa caliente meretriz, que se esconde por varios disfraces para su total conquista. Debo reconocer que la he violado en todos sus personajes, personalidades, disfrutando sus incesante gemidos y un total orgasmo que lo repito con frecuencia. Una de sus caras más deseables fue, su grave y gozosa entrada a mis venas por esa fila y punzante aguja, que recorre por toda mi sangre, destinada al más puto animo de mi esfuerzo...Su semilla da ricos frutos de euforia y más putas alucinaciones, que embarazan la audacia de mi violencia, pariendo actitudes que jamás comprenderé....

Las arpías pasan sobre mi, variedades de ella dejan su olor en mi. Por doquier, algunos paisanos me presentan a muchas más desconocidas para un breve e intenso sexo dañoso. El vicio ya es incontrolable, me es difícil de no pagar por esas malditas rameras que desintegran mi bien. Las consecuencias no las pienso, solo busco con que disfrutar el momento, para perderme y no volver, nunca más volver y estar con mis fieles mujeres…

domingo, 19 de julio de 2009

Comienzo (al hundimiento)


Las idas y vueltas de un estado oscuro, quebró la fortaleza, aquella que he puesto contra algunos perversos males que destrozan cada carne de mi paz.

Hasta algunas veces he nadado por arroyos de la más exquisita malta con su rica espuma, para disfrutar de un buen momento y olvidar por algunos segundos el mal trago de la vida. No quiero caer en la hipocresía de enfocar: "bebo porque me duele algo en el fondo de mi corazón" El gusto por esa rubia es atracción total, la consecuencia de un olvido es otra cuestión...

Nunca agarré el vicio de ese rodillo blanco con su vegetal más machucado, con su aroma suave y fuerte, que su espíritu latente llega a lo más profundo de mis pulmones, tras una fumada impura...Tal vez al cuidarme por la crónica e insoportable asma, me ha puesto recto e indiferente a ese vicio. Pero siempre estuvo aferrado en mí, tras familiares, amigos y otros seres por sus constantes vuelcos de humor hacían mi suerte.

Pude quedar libre de cada mal, sin embargo las crecidas lágrimas como las curiosidades me han puesto en una cuerda a punto de romperse y caerme al fin. Es entonces cuando lo evitable se deriva a lo inevitable...

La tentación se vertió a cálida atención, cuando algún par consumía la divina fruta de esta hermosa tierra; vestida de un vestido áspero blanco curtido y con su sabor divino y fuerte que atienta sobre mis principios. Desisto de mis cadenas y pido aferrarme por primera vez a esa bella ilusión...Siguiendo los consejos de algunos sabios, tomo el patrimonio de tomarla entre mis dedos, acercarla a mis labios y consumirla lentamente. Su alma recorre por dentro de mi, pasando por los débiles motores de oxigeno hasta la maldita conciencia; el efecto es tal que, me humilla delante de todos los severos prejuicios que he adjuntado, para confesar que su esencia me motiva a los espacios más sublimes e inexplicables, me hacen bien...Los efectos se evidencian en una desnudez de mi verdadera persona ante mis fieles amigos y una risa constante por cualquier motivo en especifico. El despeje de la realidad enfoca un sinfín de imaginaciones, mezclada con mi pura locura, que complementa un escape total y delirante...

El efecto se haya en su final étapa, agarrándome sed y un poco de hambre. Poco importa esas necesidades, ya que hube navegado por aquellos mares, alejándome de todo. No es factible pensar en si lo que hice esta mal o no, solo disfrutar el vivo instante en que deserte y soñé en alta mar.

Le tome un gusto exquisito a sus garras, me he enamorada de esa verde mujer, locamente fascinado...

jueves, 16 de julio de 2009

Ella...ellas

No puedo dejar de mirarte...Tu cuerpo moreno, como tu inevitable traspiración que recorre tu mundo, hacen una vista agradable; mientras bebo de tu jarabe.

Siento tu piel fría, por un instante, perderse en la palma de mi mano; cuando bebo nuevamente de tu vida.


Mis ojos reflejan tu esplendor, brillando por tu inmensa grandeza...


Calmas mi sed por momentos… Tu miel recorre mi garganta, hasta llegar a mi conciencia...


Si, formas parte de mi, como la pasión forma parte del amor, y logra vencer toda resistencia de mis preocupaciones... ¡Soy tuyo! Me he entregado a tus virtudes y defectos, para que confíes en mi y no dejarte jamás, nunca...



Muchos son infieles ante un amor, un sabor...Cogen a cualquier ramera vigente, para buscar un algo, sintiéndose más vacíos tras sus secuelas sabidas, que llevan a un malestar insoportable por esas mediocridades


Pero yo...No encuentro tentación en esas putas engañadoras, solo en vos, princesa de lo ilusorio. Encuentro la compañía necesaria con tu amada presencia y de la...Aliada soledad, que esta encima de regazo todo el tiempo de mi vida. Me besa con sus más calientes labios para no olvidar su sabor.



Sigo tomando hasta el hartazgo, mientras escribo los mas ricos poemas de un porvenir, surgida por la valiente inspiración de tu insaciable alcohol, y por la vigorosa soledad que me acobija...Ambas me poseen en lo prohibido y perturban mi presente, para no llorar más por dentro.


Amantes de mis noches y de mis días, me poseen en esta alegre locura...

lunes, 13 de julio de 2009

Inexplicable

...Empieza aponerse bueno, cuando el 105 se aproxima a mi destino, pero...

Mis nervios y la adrenalina son culpables del continuo movimiento de mi pierna derecha, que no para de moverse.

La desesperación por llegar de una puta vez, hace que mi amplia imaginación trabaje sobre un futuro incierto para el encuentro de hoy...Pareciese que el chofer sea participe de una conspiración contra mi paciencia, por lo la lentitud en que maneja aquel bondi; eso me motiva a insultarlo por adentros; maldigo su suerte y me enfurece más...Los semáforos también juegan un papel importante para mi intranquilidad: El color rojo abunda cada dos cuadras al transito de mi transporte; sin contar el acomodo del conductor por llegar al color rojo y esperar. ¡¡Por qué no se apura!!

El frio congela mis manos y pies, las medias encimadas no logran darme calor a los dedos...Mi campera de cuero, esparce un olor a humedad insoportable, atraída por el rocío momentos antes de tomar el colectivo. Logra mantenerme en calor, una gran aliada para este cruel frio.

La parada anuncia mi llegada, bajo del bondi y respiro el toxico humo que deja a su retirada el 105. Huyo de la plaza miserere caminando ágilmente para llegar a ese destino que tanto anhelo...Centrado en avenida Corrientes, tropiezo a variedades de gente con mis torpes pasos: emos, villeros, floggers, putas, travestis, viejas, viejos, chorros, tranzas, policías, rolingas...Se envuelven en mi cabeza y olvido por momentos la dirección de mi sitio.

Ocho cuadras caminadas desde Pueyrredon, degastan mi cansancio, pero alimentan la ansiedad de llegar. Veo la entrada y sin pensar, entro dejando todas las penas afuera. Al entrar, percibo la fragancia de los primeros cigarrillos, que asemejan la niebla de un pantano; como también las primeras voces de MIS hermanos, mezclada de risas, gritos y silencios.

Logro sentarme en un viejo sofá y entablo mi primera conversación con un camarada, que me da la más rica bienvenida; me aconseja sobre el lugar, mientras investigo con mi vista los alrededores del establecimiento. Es gratificante cuando alguien impide sentirte sapo de otro pozo.

Las chicas del sofá me hablan con una naturalidad hermosa, me dan riendas para salir de una puta vez dela ramera timidez, para que sea uno más de esa velada inminente.

Comienza el delirio...Los poetas recitan sus más ricos versos, captan mi atención como es de esperarse. Un poeta arrasa con sus crudas letras, fascinándome por completo, al igual que otros.

La música adorna un gran espectáculo, hambrientos por el arte, lo músicos taladran los oídos de cada oyente...

La sensual danza de una bella mujer, enfurece la sexualidad de los hombres y mujeres, tras el apasionante baile

La locura lleva a su máxima expresión: arte, alcohol, droga, amistad y más magias...Todos formamos una sola familia esa noche, amándonos por instantes, y consumiéndonos por momentos esa gran noche...

Borracho hasta el alma, continúo esta fiesta, tomando esa maldita ginebra.

miércoles, 8 de julio de 2009

Compinche


Llega el momento de tu esperado paseo semanal. Preparo todo para irnos de una buena vez, tras las idas y vueltas. Los ladridos constantes, es una buena señal de tu contento, y de tu sabiduría por saber que te llevare al parque, como es habitual. Quizá sea tu sentido común...Puesto la correa en tu collar azul, caminamos por las calles de la horrenda ciudad. Tu osadía es vital para que tires fuertemente de la correa con toda tus fuerzas. Como también investigar cada árbol vigente, poste de luz y hasta las ruedas de autos estacionados. El no aguantar más, hace que bendigas con tu agua bendita cualquier rincón, bautizando y marcando tu territorio.

Entablas relación con desconocidos, de tu misma especie, olfateándose mutuamente, certifican una amistad poco duradera; tras perdiéndose en nuestras espaldas. Saludas a cada individuo que se encuentran del otro lado de la vereda, y enardece las respuestas de los otros con ladridos de ambos lados. Un idioma que jamás entenderé.

Presientes la imparable llegada al parque, con ansiedad estira aún más de la correa. Tu lengua se babea hasta derramar gotas en el suelo, y tus grandes orejas se ponen en alerta al murmullo de la gente.

Llegamos...Saltas sobre mis brazos para que te deje libre por algunos momentos. Es injusto tenerte atada, cada ser debe ser libre por naturaleza. Sin ser sometido a un opresor, dueño de su bienestar...Pero soy humano, apoderar a un animal de sus alas es una nefasta verdad y hecho, designándola irónicamente como "mascota" . Tal vez precipito al ver tu entusiasmo por correr. Quizá sea un poco de amor o por tener compañía, quien sabe...

Te suelto, como loca recorres los alrededores con todas tu ganas, sin parar. Pareces disfrutar volar hacía horizontes del cual te sentís verdaderamente viva...Quedo observando tu odisea, es bueno verte así.

Saco la pelota que tanto te gusta de la mochila y lo lanzo para que juegue con ella. Esta en mal estado, debido a tus hábiles mordiscos que le has dado durante tres meses. Enciendo un cigarrillo mientras te diviertes, como de costumbre. Me acuesto en el pasto, acomodo mi cabeza sobre la mochila, y miro al cielo sin pensar.

Es increíble que un balón enloquezca tanto a un mamífero de ese modo. Como su adrenalina se pierde en las constantes mordidas dadas por ELLA a la pelota...Termino de matar al delicioso parisienne, y veo asomarse velozmente a LOLY. Me atropella sin importarle nada, juega con mis zapatillas, hasta quitarme el par izquierdo. Mis carcajadas son incontrolables, como también las risas de la señora que observa ese cometido. Rescato mi calzado, y juego un rato con ELLA, mordiéndome débilmente y saltando con simpatía.

LOLY, una mezcla de rasas nunca vistas: Su pelaje rubio a colorado, brillosos ojos celestes que, hacen juego con su collar. No goza de buen físico, ya que, su enorme cabeza, como sus patas cortas y su cuerpo pequeño, confirman una eventual deformidad. ¡Que importa! Elevo una sátira sonrisa y acaricio su osico.

La tarde pasa, y el cansancio llega con todo su entorno a mi fiel compañera, sustituyendo el correr por una relajante caminata.

Te vuelvo a enganchar en la correa, y recorremos los finales pasos de la jornada. Como es de esperarse, tus necesidades fecales forman parte de ese escenario, todas las putas funciones. Adorna el producto de su arte a la vista mía, después de haber comido horas antes unos ricos pastelitos de dulce de batata. Comienza el carnaval de nauseas en mi arruinado estomago.

Limpio los desechos, nunca me olvido de traer indumentaria para borrar las pruebas de tu delito.

Finaliza el paseo con nuevas anécdotas, y un agotamiento frustrante. La correa es floja, esta vez no tiras tanto con tu amada brutalidad. La calma se tatúa en nuestro regreso y...La mala química entre un labrador y una deforme, desata un caos. Los dueños nos obligamos a separar a estas dos fieras, que liberan un apocalipsis de mordidas, zarpasos y coros de gruñidos...

martes, 7 de julio de 2009

Agua


No puedo conseguir el sueño. Los excesos y risas convirtieron un gran espectáculo inolvidable; donde cada uno de mis pares ocupo un protagonismo importante. Sin embargo, el después me tortura con dolor de cabeza agobiante, sin contar los aullidos de mi hígado y el dolor de estomago. Soy responsable de mis actos, lo sé; pero nunca se piensa en el después. Solo en el pasado, en la gran noche. Acostado, la necesidad de salir y de abandonar de una buena vez éstas frías cuatro paredes, manipulan el descanso que necesito. Escapar parece una decisión inminente, sin tener en cuenta el estado físico deplorable en que me encuentro.

Sin más reproches, huyo de ahí y voy en rumbo a la fiebre de la sociedad. Dirijo mis pasos a las calles de la ciudad, tropezando a infinidades de personas que cruzan mis pasos...Levanto la mirada al cielo, las nubes encarcelan al sol y al cielo azul, que alguna vez fueron libres. Se nubla por completo, la llegada de la tormenta son manifestadas por el fuerte viento, y las voces de los truenos que trasmite con vigor.

Cada paso es libertad, y una incesante soledad.

Llegado a aquel bar de la calle corrientes, la lluvia adorna con sus frías e inquietantes gotas la vereda y calles de Buenos Aires. Me siento en un rincón, apegado a la ventana de cristal. Apoyo mis manos sobre mi amado cuaderno, con la birome puesta adentro del rodillo, al costado...Pido un café negro, para que combata contra mi humilde resaca y sus variantes...El olor característico de un aquél lugar, es adornada por las nubes de humo del cigarrillo, como también la sinfonía insoportable de las voces altas de la gente: "Sino querías soportar eso, hubieras ido al cementerio".

El café yace en la mesa, observo su color: negro como el vivo universo, después de revolver con la cuchara la niebla que cubría su ferviente espuma. Lo huelo, su fragancia logra reanimarme débilmente. Doy un sorbo sin ganas, vitaliza mi aliento, dejando su fuerte sabor en mi boca. Me llega a lo profundo, como un puñal que destroza mi abundante resaca; la mata sin piedad, pero...Aún sus cenizas se aferran a mí.

Converso con el silencio, utilizando mis ambiguas letras en pos de la hoja del cuaderno. Comienzo mi máximo escape a lo ilusorio, para no aferrarme al pobre presente.

La lluvia se escurre por el vidrio de cristal, capturando mi atención por momentos. Paro de derramar tinta, y veo mi rostro, reflejado por la ventana, disfrutar de la ocasión: "¿Cómo explicar la sensación de la soledad, café, letras y lluvia?”.

El poco café se enfría sin obstáculos; el tiempo no tiene fin.

Decido marcharme, el diluvio es constante, como el frio intenso. Vuelvo a caminar, las aguas mojan una parte de mi cuerpo por cada paso que doy. Me detengo, alzo la mirada nuevamente al cielo oscuro, y cada gota penetra mi desierto, dejándolo fértil. "¡Me siento vivo!" Bajo la vista y continúo.

sábado, 4 de julio de 2009

edy ven mott


Ya han pasado 20 años...No puedes recordar con exactitud el momento en que surgiste a la vida. Solo puedes guiarte por las palabras de tu creadora: "Era una mañana gris, con el frío rasgando la piel de la gente. Había pequeñas lloviznas que bañaban las calles de la ciudad de El D...La hiperinflación, como la suba del dolar, derrumbaba al país...Estuve 3 horas luchando para que salgas, pero no querías hacerlo. Pareciese que no deseabas salir a la luz. El dolor fue insorportable un momento...Pero al verte llorar con toda tus fuerzas, no me importo mi bienestar. Sino, el amor sublime de una madre hacia su bebe recién nacido".

Fue el inicio de tu vida, incorporándote en la mismísima vida. Formándote día a día en un ser, adoctrinadas por tus padres, crecía, entendiendo muchas variantes de la realidad...

Transcurriste por miles tempestades, del cual caíste, levantaste, y seguiste luchando. En cada batalla heredaste recuerdos malos, guardándolas en los profundo de ti...Ahora, tienes que seguir, acompañado de el amor de tu familia y amigo pueden fortalecerte. ¡Sé que puedes! Marcaras en esta vida, la huella de tu talento y amor. Llegara algún días, lo sé.

Conservas una caracteristica que, de niño has adoptado: la simpatica y flamante sonrisa que nunca ha de cambiar...

4 de julio de 1989, día en que llegaste , y que a lo largo de los tiempos, adquiriste un rasgo especial que te designaría para el resto de tu vida: La locura linda.

jueves, 2 de julio de 2009

Salbutamol


El sexto día llega una vez más, con el cielo desnudo por completo y el sol que adorna la tarde.

El encuentro se lleva a cabo, como es habitual cada sábado, entre amigos, compañeros y compinches. Esa lucha es un menester que seguimos con alegría y rivalidad.

Ya metidos en la cancha, elegimos el equipo a nuestro antojo. Algunos prefieren no aceptan ser elegido para ese esquipo, otros no les importa cual sea su destino.

Preparados con la indumentaria deportiva, camisetas de algunos clubes conocidos, otros de baja categoría. En ocasiones los nueve se repiten las mismas camisetas, pero generalmente son distintas. Y como es esperarse, mi camiseta es la remera grisácea vieja de JUDAS PRIEST.

Empieza el juego...La pelota se balancea de un lado a otro. Gambetas lujosas, malos y buenos pases, y buenas jugadas, hacen el panorama común de un partido...

A lo lejos, un rival elude a mis jugadores, hasta llegar al área y...Posiciona con su pierna izquierda y patea el balón con el empeine de su pierna diestra al arco, dirigiéndose al ángulo derecho. La veo venir, pero no reacciono ante la razón, entonces el acto reflejo se conquista mi habilidad. Me arrojo hacía ese costado, con la mano siniestra, logro rechazar esa bomba, tirándola afuera.

Con aplausos de mis camaradas y puteadas de mis adversarios, elevo una seca sonrisa tras escuchar esos comentarios, ocultando el dolor de mi dedo anular, tras la caída "¡Que dolor!".

El desarrollo continúa sin pausas. El arco contrario ha recibido 10 tantos, nosotros 9. Ambos defensores de los tres palos, tenemos buena presencia: pero él, con su egocentrismo y vil mandato, deteriora el interesante partido. Como también se ve implicado nuestro delantero ante las reiteradas discusiones con el arquero. Utilizan dos camisetas que son rivales de por sí, esto lleva más peleas patéticas, insultos como: "¡Pecho frío!" "Amargo" "¡Sos de la B"! Fieles ingredientes de una pelea eterna.

Agitado, por el asma heredada desde niño, trato de simular mi condición a mis amigos, pero la agonía es más poderosa. Preocupados por mi estado, buscan rápidamente mi casi vacio inhalador. Lo consumo, vacio el poco oxigeno de mis pulmones, y respiro nuevamente con el salbutamol que se dirige a mis alveolos...

Recuperado, vuelvo completamente, con euforia y ataques de risas por ese liquido. Mis pares ríen por mi risa, y a lo lejos uno me dice: "¿Esta bien ASMANN?" Todos reímos sin parar, un chiste picante peor agradable. Comparar mi enfermedad con ese arquero que una vez estuvo en un equipo importante fue ingenioso...Sigue el juego.

Queda poco tiempo, estamos empatados, pero el cansancio insoportable es mutuo, hasta que...Un defensor de mi equipo fulmina al arco con un zurdazo pasando media cancha; atajando el arquero, dando rebote y por mala suerte, toca en las manos de la otra escuadra: penal. Las protestas son evidentes, pero...fue una falta. Me llaman a mi para lanzar desde el punto del penal, voy a ese encuentro. Sin pensar pateo el esférico, haciendo el gol por entre las piernas del arquero...

Después de ese cometido, se termina la hora. Las cargadas son inmensas, pero sanas. Mi delantero y el portero se abrazan como señal de olvido ante lo acontecido. La amistad es más vigorosa que la adversidad. ¡Vaya que si!... Traspirados totalmente, hablan del partido y los planes para la noche. Mientras miro aquella mujer pasar por la calle "¡Que linda es...!"

Placer en la arena


Llevándonos mutuamente, enfrentamos al viento cálido, como también la húmeda arena que se interpone a nuestros pasos. El atardecer nos baña con su luz, al igual que las incesantes olas de ese bello mar.

Ella, me agarra la cintura cariñosamente la cintura, para no dejarme escapar. Mis brazos se alojaban en su hombro y cuello, para que jamás huye de mí.

Las miradas filosas hacen inevitables nuestras sonrisas. ¡OH si! Solos, con el canto del mar, seguimos juntos a la par.

En un instante, se olvida que estoy a su lado. La noto distante, mirando sus pasos. A lo mejor pensará en, si la mentira dicha a su marido había sido convincente, tras inventar que iría a la casa de su madre. Tal vez disfruta, quién sabe. Dejo de hacerme la cabeza y seguimos con la travesía.

Paramos, el cansancio es evidente. Sentados en la orilla, sobre la arena, vuelve a adorarme con su ternura, mirándome con eso ojos pardos brillados por el sol, que se iba a descansar pronto. Viene a mí, se sienta en mi regazo; su pollera flameaba como bandera, mientras sus besos conquistaban mi boca, y mis manos acariciaban sus suaves y tentadoras piernas. Muerde con pasión mis labios y deja el calor en ellos. Conquista mi cuello con más besos rojos, que me enloquece cada segundo, cada beso. Continua su aventura por mi cuerpo, pasando por mi abdomen, y más abajo... Decido tomar las riendas, desabrocho sus prendas, primero su blusa, llego a su senos, suave como el terciopelo, mi lengua comienza a gobernarlos, no dejo ningún lugar sin besar. Llego a su pezón, y lo chupo vigorosamente; sus primeros gemidos son un hecho, al igual que la incontrolable calentura que crece cada segundo.

La vuelvo en la arena, boca arriba, mis manos cometen el pecado de redescubrir todo su cuerpo, mientras la beso sin obstáculos, sin prejuicio alguno. Esta vez recorro su cuerpo con mi lengua, hasta llegar a lo prohibido, donde el fuego yace, como también todo placer y fantasía. Recorro por encima de su prenda, siento el calor intenso. Ella, vuelve con sus gemidos, yo con mis dientes la desnudo por completo, prosiguiendo con besos y perdiéndome en su sexo...

Desesperados, una vez más, vuelve a cabalgarme, y nos quema la lujuria del placer. Transportándonos a otro mundo, donde el amor y la calentura es nuestro oxigeno. Hacemos el amor como si fuera la última vez, quemándonos en nuestro rico infierno...


Nos detenemos, es hora de huir, sacudimos la arena que yace en nuestra piel. Es de noche, las estrellas iluminan las aguas, y el frio del mar es encantador. Marchamos, abrazados cálidamente, con una ilusión: volver a vernos, para pecar celestialmente nuestro puro y ardiente amor.